martes, 1 de diciembre de 2015

LA PRUEBA DEL POETA

El poeta ha de distinguirse desde el mismo comienzo de su existencia por su sentido de la igualdad que a veces llegará a embargarle como un sentimiento muy intenso. Debería ser sometido pues a la siguiente prueba: Si ve a todos los demás como si tuvieran la misma edad y pertenecieran a la misma clase social será poeta; si no, no.

domingo, 23 de agosto de 2015

EL BIEN Y EL MAL

El mal no es la fuerza, sino una debilidad. Crece a veces con tanta rapidez, y sin ninguna base, que no puede soportar su propio peso, y se derrumba; mientras que el bien es el equilibrio perfecto y el punto de apoyo de todo lo demás. No es fácil, no todo el mundo puede resistir sin perder la cabeza el espectáculo del mal, y prefiere o la locura o la inconsciencia. El movimiento del mal es lineal, mientras que el del bien es circular, giratorio, y nunca se muda; y vuelve a sí mismo. El destino del bién es el regreso. Es como el eje que cuando se mueve nunca cambia de sitio. El bien se parece a un zapatero. En el crecimiento, siempre anómalo y excesivo, del mal está el gérmen de su destrucción. El mal no es lo contrario del bien. ¡Son cosas tan distintas entre sí que no admiten ninguna relación! Igual que lo contrario de una manzana no es una granada. Aunque haya un águila puede seguir existiendo un león, aunque no haya un águila puede seguir existiendo un león. El mal no se combate con el bien, sino que se destruye a sí mismo. El gran mérito del bien es que es independiente del mal. Conoce el mal, pero no lo imites jamás. Ten valor. Te ayudará la poesía, que es la inocencia puesta entre el conocimiento y la ignorancia.

viernes, 15 de mayo de 2015

LA BELLEZA FRENTE AL EXCESO DE ACCIÓN, Y ESPAÑA

Recorrí España el verano pasado palmo a palmo, de una punta a otra; desde la Plaza de la Merced de Málaga hasta la Estación Marítima de Vigo; y he comprobado su belleza una vez más. España es un país efectivamente bello; pero sus ciudadanos, dominados desde hace por lo menos dos siglos por el espíritu de discordia, y sin haber podido resolver todavía los problemas de convivencia y la fractura social, parecen vivir en general ajenos al sentido profundo de esta realidad en su vida cotidiana, aunque se interesen momentáneamente por ella cuando participan en algún programa cultural, visitan algún museo, o proyectan algún viaje de interés turístico durante la época de vacaciones. Y sin embargo no viven con esa belleza. El "interés turístico" es sólo un modo de minimizarla en aras del aumento del consumo. Es deseable una metamorfosis de nuestra sociedad, a través de la cual pueda convertirse en una comunidad de estetas, como ya sucedió en Francia. Porque verdad y belleza se hallan unidas, ya que incluso la belleza todavía es más verdad que la propia verdad, pues constituye una evidencia; una verdad objetiva. Aunque a "sensu contrario" la fealdad también lo sea. Y así uno de los personajes de mi imaginación, que posiblemente haya existido en la vida real, argumentaba que, no obstante haber sido indeciso en casi todo, de lo único de lo que podía sentirse completamente seguro era de su propia fealdad; por lo que la conciencia de ésta no dejaba de reportarle cierta satisfacción; ya que le permitía por lo menos estar seguro de algo. Es cierto que la sensibilidad individual subjetiviza y matiza el sentido de la belleza, pero aún así es ésta la más objetiva de las verdades, ya que hay un acuerdo tácito en su reconocimiento. Sí, España, que es un país muy bello, debería también constituirse en un país de estetas. Y la serenidad y ecuanimidad que necesita debería apoyarse en el sentido de la belleza y en su contemplación la cual puede redundar en capacidad de concentración apta para corregir ese exceso de acción que en tan gran medida ha perjudicado a nuestra vida en común.

sábado, 31 de enero de 2015

SCARDANELLI de Friederike Mayröcker

Friederike Mayröcker es la única escritora que recuerdo, aunque probablemente haya más, que sea homónima de Friedrich Nietzsche. Muy recientemente ha sido bellamente publicado en e.d.a, NorteySur, y traducido al español por el poeta y traductor, José Luis Reina Palazón, su libro de poemas titulado Scardanelli. El día 26 de diciembre de 2013, en una pequeña reunión privada que transcurrió en la bonita casa de Christell Fallenstein en Viena, conocí en a aquella fascinante poeta austriaca, la cual recitó para nosotros el primer poema de este libro que está ahora a disposición del lector español. Reproduzco algunos de sus versos encontrados al azar: "soy cristiana, en las ventanas abiertas la meseta de lagos en el cielo mañanero, 1 migaja de pan desmenuzada entre los dedos, ando echada hacia delante me limpio el ojo izquierdo: empequeñecida, todo ésto: la anudada mañana la vista que se pierde, el polvo verde en las venas el continuo envejecer: tú puedes mirar: este paso a la eternidad (interrumpido por duros ataques de tos -("pulmón alpino" concretamente) la sombra ahora en la otra parte de la calle porque ya es septiembre- antes vivíamos puerta a puerta, nos decíamos oh qué buena la vida (...) Había "currado" en el jardín sembrado de espinas: en las yemas de los dedos de la mano derecha me he sembrado espinas, ramo deshecho de las moribundas julianas junto a las candelarias que se han vuelto negras. (...) Estas montañas de anhelo, sueños de petirrojos, los zapatos extraviados (desparejados) en el corredor - de noche al baño tambaleando tropiezo con ellos, ah qué felicidad: Couperin desde el éter entonces sin embargo hace muchos años "la colina pecosa" que nosotros, con las manos cogidas, corríamos al valle, arroyos anhelantes nos florecían, Höld".

VIEJA Y NUEVA POLÍTICA

Yo ya no puedo soportar a ningún político que me salude desde lejos. Yo ya no puedo soportar a ningún político que me salude apretando el puño. Yo ya no puedo soportar a ningún político que me salude levantando el brazo. Yo ya sólo puedo soportar a un político que me tienda las manos.

sábado, 17 de enero de 2015

LA FUENTE DEL GOZO

Tú no me hiciste para la gloria sino para el gozo. Estabas al final del verano en La Huerta, cuando me vestí con las hojas de los árboles, con las de los castaños, y con los pétalos de las flores; y descubrí así la identidad, e incluso la femineidad. Pues esta última no la encontré cuando mi cuerpo se desarrolló, sino cuando mi mente se desarrolló, y también cuando descubrí una extraña armonía de la que yo también podía formar parte. También la música ya vibraba en mí. Arriba, en la cocina, ya estaban preparando la cena. Se oían las voces de María e Isabel; y el Emparrado se llenaba con los aromas de los platos que estaban preparando. El sonido de la vajilla en las bandejas, cuando iban a poner las mesas, se parecía al de las esquilas de las ovejas. Y siempre, como siempre en la vida, se oían las voces de unos niños jugando a lo lejos. Así descubrí la continuidad de la vida. Ahí, en la memoria, está la fuente del gozo, también hundida en parte en el inconsciente, que es como se ha venido en llamar el olvido necesario para crecer: Un tiempo sobre otro, en la fuente del gozo, que es la sensación de permanencia. La tierra en el borde de la fuente del gozo está todavía húmeda, y en ella escribo con un palito palabras de agradecimiento, pues nada ha cambiado y vivimos en un presente permanente. Isabel y María están hablando, ¡speak up!, en la cocina. Ya es hora de cenar y están poniendo las mesas. Estamos todos.